miércoles, 11 de noviembre de 2020

La ingenuidad Detrás de la Juventud de Kiriyama

 Ya me encontraba con ganas de hablar un poco de 3-gatsu no Lion por aquí, principalmente porque soy un maniático con la serie y estoy desesperado porque más gente la conozca, la ame e incluso, si es posible, sólo si es posible que en un futuro se gane un Oscar y que por favor saquen luego la tercera temporada que ya va siendo hora, además que el manga no hace mas que mejorar.


Con todo esto me pregunto a veces si simplemente debería traducir el manga del inglés al español, bien podría poner una excusa como "no tengo tiempo" o "estoy muy estresado ganando plata" pero en vista que en este último año solo he sido un marginado social con acceso a una computadora solo diré la vergonzosa verdad.

ME DA DEMASIADA PEREZA TRADUCIR TODO ESO.

Es por eso que la mejor solución para todo este problema mis queridos lectores, es que aprendan inglés y léanlo.

Bueno, en vista que ya me descargué bastante con esas cosas que no me dejaban dormir por la noche comentaré un poco sobre la razón por la que decidí trabajar un poco para variar.

Me he visto el anime ya como por doceava vez y me sigue pareciendo una obra maestra, pero me causó particular curiosidad que cuando hablaba con otras personas que habían visto la serie estas últimas casi no mencionaban al divino Shimada Kai (8Dan), y eso definitivamente no podía ser, él debe ser catalogado como una religión y ser adorado y amado por todo el mundo, dando ofrendas y rezándole tres veces al día, con una copia de aquel cartel que los ancianos colgaron en Yamagata.

El título de este post se ve como algo serio, y originalmente quería hacerlo así pero cada vez que menciono a mi Shimada-sama termino yéndome por las ramas.

El caso en particular que quiero hablar con ustedes el día/noche de hoy es la vez en la que Kiriyama terminó completamente HUMILLADO por el verdadero protagonista de la serie.

Honestamente esta escena tiene mucho poder, donde se muestra a nuestro querido Kiriyama en una faceta que quizás desconocíamos hasta ese momento, mostrando continuamente hostilidad hacia aquel viejo verde de Gotou, y razones tenía de sobra la verdad. Es en este momento en cuando se ve una de las falencias de Kiriyama, quien, al estar cegado con ganar su partida contra Gotou termina por subestimar a Shimada.

Lo peor, o lo mejor realmente, es que Shimada está consciente de esto y procede a humillarlo sin que este se de cuenta hasta casi el final de la partida. Ya en las últimas, Kiriyama termina rojo como un tomate y forzándose a sí mismo a quedarse en el sitio y aceptar toda la humillación por su falta de respeto.

Shimada obviamente termina destrozando a Kiriyama en una partida cuyo kifu debería publicarse en una página para adultos +18, y de paso, mientras se tomaba un tecito tranquilo termina ganando contra Gotou.

Este momento es importante porque considero que fue cuando se nos dio a entender que el protagonista de la historia no es invencible y que perfectamente puede perder, dándole aún más énfasis en lo que sucede antes y después de la partida. Al final el error de Kiriyama fue algo muy simple que probablemente, gracias a Shimada, nunca más vuelva a cometer.

Todo debido a su falta de experiencia.

(Mención especial al diálogo final del capítulo entre el buen Smith y nuestro señor Shimada Kai 8Dan)